La transformación digital está asociada a una serie de mitos que, por definición, son conceptos erróneos.
Hay que ser conscientes de ellos y, sobre todo, dominar la forma en que esta transformación se extiende por cada empresa. Para ello es ideal contar con un partner tecnológico como Nucleus.
Ahora bien, aunque son muchos los mitos sobre la transformación digital, para iniciar este artículo podemos enumerar cinco de ellos que, sin duda alguna, frenan el avance de las empresas, obstaculizan la innovación e incluso pueden distraerte de la meta.
1. Todas las empresas deben embarcarse en su transformación digital. No, esto no se aplica necesariamente a todos los procesos y a todos los modelos de negocio.
2. La transformación digital se basa en tecnologías emergentes o disruptivas. No, las tecnologías maduras suelen ser igual de eficaces.
3. Las empresas más rentables tienen más probabilidades de éxito en su transformación digital. No, es sobre todo una cuestión de método.
4. Una empresa tiene que transformarse a sí misma antes de que lo hagan sus competidores. No necesariamente porque la rapidez no importa tanto como la eficacia.
5. Los directivos están muy interesados en la transformación digital. No, en realidad, los líderes visionarios y dispuestos son minoría.
Las oportunidades de la transformación digital
Aunque los mitos son un flagelo que hay que erradicar, en la última década la transformación digital se ha vuelto cada vez más esencial para la prosperidad de las economías modernas.
Todos los sectores se ven afectados: recursos humanos, energía, transporte, telecomunicaciones, producción industrial, sanidad, agroalimentación, etc.
El desarrollo de nuevas tecnologías (como la inteligencia artificial, el Big Data, la robótica, etc.) se considera una de las principales manifestaciones de la transformación digital, contribuyendo positivamente a la productividad de las organizaciones y al crecimiento económico.
En ese sentido, el Foro Económico Mundial estima que el valor potencial de la transformación digital para la sociedad y la industria podría alcanzar los 100 billones de dólares en 2025.
Ya sea para hacer frente a los nuevos competidores del mercado, para adaptarse a los nuevos comportamientos de los clientes o para aprovechar las nuevas tecnologías que fomentan la innovación o impulsan la productividad, es esencial que las empresas den este giro digital y replanteen por completo sus actividades sin demora.
Dejá de posponer la transformación digital de tu empresa
Si has estado posponiendo la transformación digital de tu empresa por culpa de los rumores, déjanos ayudarte desmontando algunos mitos al respecto:
Significa rediseñar tu sitio web
Para los que no lo sepan, la transformación digital puede parecer un proceso de optimización que mejora algunos puntos de contacto con el cliente.
Sin embargo, es mucho más que eso: implica crear procesos eficaces para prácticamente todas las partes de su empresa, principalmente para el departamento de recursos humanos.
Sólo el equipo directivo puede impulsar la transformación digital
Existe la idea errónea de que solo la dirección es responsable del éxito general de los esfuerzos de transformación digital.
No obstante, el éxito depende enteramente de cada individuo que forma parte de la organización. Si una gran parte de la organización no está totalmente de acuerdo con el programa, es difícil que sea un éxito.
Es una iniciativa que afecta a todos los implicados, no sólo en cuanto a las herramientas y tecnologías que manejan, sino también en cuanto a su estilo de trabajo.
Es demasiado costoso
La transformación digital se ejecuta en función del calendario y las necesidades de cada empresa.
De hecho, al convertirte en partner de un aliado tecnológico como Nucleus se elabora una hoja de ruta para describir todos los cambios que deben realizarse. La organización es prioridad.
Considerar esto como una carga financiera no es una actitud acertada y los beneficios están a la vista.
Los clientes no creen que lo digital sea una prioridad
Vivimos en una época en la que las empresas seducen a los clientes con entregas en el mismo día, resolución instantánea de problemas y otras ofertas que podrían haber parecido poco razonables hace tan solo una década.
Pero hoy en día se espera que todas las empresas traten a sus clientes y empleados como reyes. Con los nuevos procesos de transformación digital se pueden ofrecer experiencias agradables.
La gestión del talento es parte del proceso de transformación digital
La transformación digital está dando lugar a nuevas formas de trabajo, móviles y flexibles, y a un nuevo entorno profesional que mezcla generaciones, aumenta las demandas de los empleados e imposibilita las políticas generalistas de RRHH.
Los RRHH se están convirtiendo en el mascarón de proa de una nueva relación entre la empresa y sus empleados. Una relación más basada en la experiencia del usuario y en la participación de todos los departamentos en la estrategia global de la empresa.
Para llevar el barco a buen puerto y seguir satisfaciendo las demandas de empleados y candidatos, el área de recursos humanos no sólo debe adoptar tecnologías que simplifiquen los procesos, sino derribar mitos y acostumbrar a los empleados a las nuevas herramientas mediante una política eficaz de gestión del cambio.
Esto será aún más eficaz si RRHH adopta las herramientas adecuadas, como la firma digital para los contratos internos y externos, las herramientas de introducción automática de documentos y las tecnologías de comunicación interna.
Otra funcionalidad importante es la selección del personal, una solución que se proporciona en un sitio web nativo, desde la URL de la empresa, para la publicación de ofertas laborales e ingreso de postulantes.
En este contexto, la función de RRHH desempeña un papel fundamental en la competitividad y comparte plenamente la visión innovadora de la empresa y su responsabilidad de cara al futuro.
En conclusión, para ayudarte con la gestión de personal y evitar que los empleados busquen otras opciones de trabajo, existen software como Nucleus con funcionalidades valiosísimas como la gestión del desempeño, capacitación y desarrollo, además de selección de personal.